Glencore Plc ofreció 325 millones de dólares por la participación minoritaria que Vicentín tiene en la planta agroexportadora Renova, que es una de las más grandes industrializadoras de soja del país y nació como una sociedad en conjunto de ambas compañías.
Según un cable publicado por la agencia Reuters, que cita fuentes extraoficiales con acceso a las negociaciones, esta oferta expiró a fines de marzo pero Glencore está preparando una nueva propuesta, aunque la pandemia mundial de coronavirus podría afectar el proceso.
La propuesta incluso fue formalizada ante el juez que entiende en el concurso de acreedores que presentó Vicentín en marzo, con el fin de saldar la gigantesca deuda que mantiene con sus proveedores.
Por eso, la oferta de Glencore podría ser un bálsamo para el “estrés financiero” que la compañía nacida en Avellaneda (Santa Fe) atraviesa desde fines del año pasado y que generó un sacudón en el mercado de granos.
Historia
Hasta diciembre de 2019, Glencore y Vicentín poseían Renova en partes iguales. Pero ante la crisis de la firma argentina, Glencore avanzó con la compra de un 16,7 por ciento adicional para pasar a controlar dos tercios de las acciones. Ahora, quiere adquirir el resto.
Reuters señala que sus informantes aseguran que la nueva oferta podría mantener el precio, aunque también reducirlo debido al impacto que ha tenido el coronavirus en los mercados mundiales y en las cotizaciones de las empresas.
Además, se espera que Vicentín pueda avanzar con el proceso de renegociación de deuda con sus proveedores; principalmente, productores agropecuarios y cooperativas.
Según Reuters, la deuda comercial de Vicentín se ubica en 300 millones de dólares, a lo que hay que sumar más de mil millones con bancos locales e internacionales que ingresarán a las negociaciones en una segunda etapa, luego de que finalice la reestructuración con los proveedores.
La Voz del Interior