Pese a que están conectados con lo que ocurre con los precios del petróleo, que mostraron en los últimos días un fuerte retroceso, los valores de los fertilizantes se mantendrían en sus actuales niveles y no tendrían una baja significativa al menos en lo inmediato, según expertos consultados por LA NACION. En 2019 el mercado de fertilizantes se ubicó en la Argentina en un nivel récord de 4,6 millones de toneladas.
Una mayor siembra esperada en los Estados Unidos en la nueva campaña, compras anticipadas de algunos países y una menor oferta disponible cuando China enfrentó la pandemia por coronavirus, están entre los factores que sostienen el mercado.
"Estos valores del petróleo son producto de la coyuntura del exceso de oferta y falta de lugar para stock y transporte. Esto va a apurar el cierre o bancarrota de varias petroleras hasta que se nivelen la oferta y la demanda, pero no veo una baja abrupta de precios de fertilizantes, sino una baja a medida que se bajen los stocks y se produzca con materia prima más barata", evaluó Horacio Busanello, consultor.
"No veo una baja abrupta porque la demanda de fertilizantes no cayó como la de petróleo y no hay problema de almacenamiento", agregó.
Matías Amorosi, de la consultora AZ Group, indicó que "en el corto plazo" no bajarían los precios de los fertilizantes porque "hay una demanda muy fuerte en Estados Unidos -en campaña de siembra con 6 millones de hectáreas más que el ciclo pasado entre maíz y soja- y no hubo tanta producción china en el mercado".
"Por más que el petróleo haya caído, no vemos una igual caída en los insumos. Es una foto de hoy, no una película", señaló Amorosi.
Jeremías Battistoni, también integrante de AZ Group, amplió: "Estacionalmente nos encontramos en un momento de alta demanda. La llegada de la primavera en el hemisferio norte da sostén a los precios. En oriente los principales consumidores, con India a la cabeza, se muestran activos en las compras. A la fuerte reactivación de la demanda se suman los cuellos de botella logísticos generados por la pandemia, generando aún más presión sobre los precios. Por último, la necesidad de asegurar el abastecimiento de productos esenciales para la producción genera situaciones particulares de demanda". En este contexto, la Argentina también está demandando de cara a los meses de mayor importación.
De acuerdo al sitio www.agbi.com.ar, para planteos de soja en zona núcleo los fertilizantes representan el 16% del costo directo, mientras que en maíz el 31%.
"Hoy las empresas están avanzando en compras de insumos para la próxima campaña. En este sentido, se analizan precios históricos, donde con valores de 460 dólares por tonelada el fósforo se ubica cerca de los mínimos, presentando relaciones de compra positivas para todos los granos. En lo que respecta a la urea, con valores de referencia de 390 dólares por tonelada el análisis deberá ser más puntual; el relativo sostén de precios del insumo contrasta con la caída en el precio de los granos", analizó.
Eddy Fay, consultor, indicó que el "driver" más importante está vinculado con la demanda de los insumos para la siembra. "No esperaría una baja del precio de fertilizantes, ya que la demanda a esta relación insumo-producto sigue firme en el mundo", dijo.
La Nación - Fernando Bertello