En el primer trimestre del año se pudo ver un incremento del 10% en el volumen de las exportaciones argentinas (de productos del agro) hacia los Estados Unidos ", dijo José Molina, agregado agrícola argentino en ese país. En una charla virtual organizada por la Bolsa de Cereales de Córdoba, Molina destacó entre esos productos a la carne vacuna, quesos, productos enlatados y no perecederos, entre otros. Vale recordar que hasta 2016 el principal producto argentino de exportación a los Estados Unidos fue el biodiésel, pero ese mercado se cerró luego de sanciones contra la Argentina por supuesto dumping, algo rechazado por la industria local. En carne vacuna el país tiene una cuota abierta de 20.000 toneladas desde fin de 2018.
En Estados Unidos, el cierre de frigoríficos debido al coronavirus llevó a que se limiten las ventas en supermercados.
"Mucha de la producción de carne argentina va a parar a las hamburguesas, porque más del 50% de los productos cárnicos va al consumo de hamburguesas y ellos necesitan suplir producción a base de feedlots con carnes que llegan de la Argentina, Nueva Zelanda, Australia y Uruguay", describió.
Molina advirtió que luego de la pandemia podría haber una merma en la producción de carne de ese país, aunque señaló que era aventurado hablar sobre lo que podría pasar más adelante.
"La Argentina tiene una cuota de 20.000 toneladas, la cual es utilizada debido a la suma dependencia del producto", dijo. "Estaba viendo que en el primer trimestre del año se superaron todas las exportaciones del mismo período de 2019", manifestó. Señaló que parte se debió al incremento de compras en el marco de la cuarentena en ese país.
Estados Unidos es el segundo mayor importador de alimentos del mundo con US$170.000 millones. Según Molina, en los últimos 10 años creció un 60% su demanda de alimentos y antes de la llegada del coronavirus se esperaba un aumento del 35% en la demanda. Agregó que en el actual contexto esa previsión deberá ser actualizada. De todos modos, podría haber una mejora del 15% en la demanda total de alimentos, con niveles del 55% en frutas y del 35% en hortalizas.
Sobre el etanol de maíz, cuya situación se complicó en EE.UU. por la caída de la demanda de combustibles, dijo que hay mucho stock acumulado. Añadió que para el mediano plazo se habla de una recuperación en "U" más que de una "V", ya que el virus está generando "una crisis petrolera que impacta en la baja del consumo".
"La clave en la demanda del maíz en Estados Unidos es el etanol. El 40% de la utilización de maíz es para el etanol. Ellos tienen el corte obligatorio del 10% de etanol en el combustible, lo que representa cerca de US$15.000 millones anualmente. Además, la caída del consumo de naftas en EE.UU., que es del 43%, impactó mucho en su consumo y es una industria que estaba apostando mucho a la exportación de etanol", amplió.
Productos
Las peras, manzanas, frutillas, limones, langostinos, miel, te, vinos y ajos, son algunos de los productos argentinos que se exportan hacia EE.UU. En el último año se vio un incremento en quesos, donde la Argentina tiene una cuota de 3800 toneladas para el producto del tipo italiano.
Molina destacó oportunidades para las legumbres. "Vemos con alegría que se hayan identificado como potencial de crecimiento el poroto común y el negro", afirmó.
La quinoa y chía son productos considerados "nuevos" en Estados Unidos por lo que, de acuerdo con Molina, van a tener mucha demanda a futuro. "El consumidor estadounidense es un consumidor viejo y hay un nuevo mercado para los productos con altas capacidades de vitaminas y minerales para reducir el colesterol. Es un mercado más exigente, porque hay enormes medidas para entrar con productos etiquetados en la producción", destacó.
"El mercado (norteamericano) es muy diversificado, las importaciones son de alto valor agregado con mucho impacto regional. Nuestro primer rubro de importación son los vinos, el segundo son los productos de la pesca, las frutas y hortalizas", sostuvo.
La Nación - Belkis Martínez