Hasta el jueves pasado las empresas agroexportadoras ingresaron en el mercado de cambios local poco más de u$s2.200 millones y según las proyecciones, el último mes del año terminaría en un total de más de u$s2.500 millones, cifra récord para este período. Este dato es clave porque se enmarca en un momento de máxima tensión para las reservas netas del BCRA que según consultoras privadas se ubican en alrededor de u$s2.200 millones, luego de que la semana pasada el Gobierno pagara al FMI u$s1.855 millones, correspondientes al multimillonario crédito que tomó Mauricio Macri en 2018. La economía argentina necesita dólares frescos y una vez más el campo se convierte es uno de los pocos sectores que genera divisas genuinas. Es que este 2021 cerrará también con un récord en la liquidación de dólares de las agroexportadoras de más de u$s33.000 millones.
En tanto, en este último tramo del año el trigo continúa rompiendo batiendo todas las marcas con una súper cosecha estimada en 22 millones de toneladas y altos precios internacionales, es por ello que el viento de cola en el ingreso de divisas se prolongaría al menos durante el primer trimestre del próximo año. Según las proyecciones de la Bolsa de Comercio de Rosario el sector liquidaría un total de alrededor de u$s9.000 millones, cifra también récord para este periodo.
Lo cierto es que si bien el ingreso de divisas será abultado estará lejos de ser suficiente ante los millonarios compromisos que deberá afrontar el Gobierno con el FMI. Concretamente, según explica la consultora Equilibra, en enero vencen u$s746 millones de capital e intereses de bonos y letras del Gobierno Nacional, y se le pagarán otros u$s731 millones al FMI que dejarán la cuenta de DEG en cero. A este escenario se le suma que habrá que contabilizar además u$s315 millones de vencimiento con otros multilaterales.
“A su vez, a partir de febrero, todos los servicios de deuda que no puedan refinanciarse deberán cubrirse con reservas internacionales. Entre febrero y marzo, se le deberán pagar u$s3.425 millones al FMI y u$s670 millones a otros multilaterales, además de caducar el “período puente” acordado con el Club de París para regularizar los servicios de deuda con el organismo (u$s2.000 millones). Es difícil pensar en un escenario en el que el Gobierno pueda afrontar estos pagos sin llegar a un acuerdo con el FMI”, adelanta la consultora económica.
Así las cosas, porque a pesar del ingreso extraordinario de dólares que el campo aportaría en diciembre y los primeros tres meses del 2022, la tensión sobre las reservas continuará en su máximo esplendor si el Gobierno no cierra un acuerdo con el FMI antes de marzo. Como dato positivo y que puede abrir un escenario favorable para la Argentina es que en la medida de que la administración de Alberto Fernández cierre un acuerdo “sustentable”, el 2022 promete ser un año de precios sostenidos para las commodities del campo, por ello las primeras proyecciones adelantan que el sector aportaría en total más de u$s37.400 millones.
Ámbito Financiero – Yanina Otero